sábado, junio 25, 2005

Blog y zen

Hola agujero negro sideral. Me dirijo a ti porque no tengo ni idea de quién está al otro lado y yo esto de Internet siempre me lo he imagino difuso a la par que confuso. Todavía no sé por qué he creado este blog. Supongo que como culo que veo, culo que quiero, me he puesto a navegar por unos cuantos y he dicho de la forma madura y sensata que me caracteriza: "Nena quere blog, cómo s´hache, buaaaah, gugu, tata, arf, arf". Así que me he autocreado esto que no sé muy bien hasta dónde llegará. En los blogs que he visto hay de todo, en éste seguramente no. Para qué engañarnos. Uno tiene una o dos historias que contar en la vida y las va repitiendo hasta el infinito, (ahí están El Lute, Super Obregón, Mariano Ozores, Rajoy o El Dioni como ejemplos de esta barata reflexión), así que supongo que giraré sobre mi misma con los rizos al viento (no, no soy Bisbal, aunque no me importaría tener esa capacidad para ensanchar las fosas nasales y esconderme dentro dándome la vuelta como un calcetín) y compartiré contigo, agujero negro, lo que se me pase por la cabeza. De momento, en un ejercicio de introspección y de filosofía zen, he buscado en mi interior y me he encontrado de cara con un estómago vacío. Hora de comer.

1 Comments:

At 7:30 p. m., Blogger Gastromaquia said...

El Zen suele aplicarse para la vida cotidiana. Veo que tú lo llevas muy a rajatabla :-)

 

Publicar un comentario

<< Home